Elimina los depósitos de las válvulas de inyección, las válvulas de admisión, las bujías y la cámara de combustión y evita que se vuelvan a formar.
Pone fin a las dificultades a la hora de arrancar y a la marcha irregular del motor. Cuida todos los componentes del sistema de inyección de gasolina. Protege todo el sistema de combustible frente a la corrosión. Mejora la toma de gas y la compresión. Optimiza los valores de los gases de escape y el rendimiento del motor. Los motores limpios consumen menos combustible y reducen las emisiones de sustancias nocivas.
Ámbito de aplicación
Apto para todos los motores de gasolina, como medida preventiva o para solucionar un problema determinado. Sometido a prueba en turbocompresores y catalizadores. Verter directamente en el depósito de combustible. 300 ml son suficientes para hasta 70 l de combustible. Aplicar cada 2000 km como mínimo para mantener limpio el sistema.
Peso: 0,300